Según un informe sobre economía creativa publicado por UNESCO, estamos ante la necesidad urgente de encontrar nuevos cauces de crecimiento económico que estimulen la creatividad y la innovación en la búsqueda de un desarrollo sostenible.
Por esta razón, el 21 de abril se celebra el Día de la Creatividad y la Innovación, con el objetivo de poner en la agenda mundial la promoción del pensamiento creativo y el trabajo multidisciplinar como solución a las problemáticas que nos atraviesan.
Creatividad e innovación ¿El verdadero valor de las organizaciones?
Para comprender la importancia de llevar estos procesos dinámicos al interior de las organizaciones -tanto públicas como privadas- es necesario antes acercarnos a su naturaleza.
¿Qué es la creatividad?
Si bien no existe una definición única sobre el concepto, sabemos que la creatividad surge de la memoria asociativa. Todas las personas tienen esta capacidad. Lo que se debe hacer para “entrenarla” es nutrir estas asociaciones y conectar los puntos de su experiencia. Este proceso siempre es más rico si se hace de manera colaborativa, es decir, en contacto con otras ideas y puntos de vista diferentes.
¿Qué es innovar?
El proceso de innovación se basa en la resolución de problemas a través de ideas creativas y se define por el impacto que generan. Muchas veces, las ideas más relevantes no son las más radicales, sino las que resuelven una necesidad real.
Existen tres niveles de innovación:
- Marginal: genera una mejora sobre una propuesta de valor actual.
- Incremental: amplía la propuesta de valor existente.
- Radical: diseña una nueva propuesta de valor (solo el 1% de las ideas o nuevas patentes son innovaciones radicales).
Innovar para impactar
Ya no hay dudas de que estamos atravesando un momento de cambio exponencial, donde no existen fórmulas exactas para enfrentar el futuro. Sin embargo, las empresas que sepan anticiparse, adaptarse y cambiar con agilidad ante los nuevos retos, tendrán éxito.
El enfoque de la innovación permite ver los cambios como oportunidades y, en este sentido, la clave está en aprender a trabajar de manera colaborativa, creando soluciones que generen impacto positivo en la vida de las personas.
En Grupo Tagle asumimos el desafío de llevar el pensamiento innovador y el trabajo creativo a todas la áreas de nuestra empresa.